Page 120 - Aprendizajes y Legados del Trabajo en el Campo

Pero como se describe en el Capítulo 3, el programa de América Latina y el Caribe brindó
apoyo para fortalecer los programas universitarios en tres importantes universidades agrícolas
desde mediados de la década de 1980 hasta el 2006: la Escuela Panamericana de Agricultura, más
conocida como Zamorano, en Honduras; la Escuela de Agricultura de la Región Tropical Húmeda,
conocida por su sigla EARTH, en Costa Rica; y el Instituto Superior de Agricultura (ISA), en la
República Dominicana. Estos proyectos se basaron en dos ejes centrales. Uno de ellos fue mejorar
la calidad de la enseñanza mediante la incorporación de experiencias prácticas de aprendizaje
con los pequeños agricultores de las comunidades locales, utilizando un enfoque de articulación
de servicios de enseñanza (TSA). El otro consistía en becas de estudios para que los jóvenes de
la región procedentes de medios desfavorecidos pudieran asistir a la universidad. Durante la
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década de 1990, las becas se concedieron en gran medida en respuesta
a una demanda espontánea. A partir de 2002, las becas se dirigieron a
La Iniciativa de jóvenes (en particular mujeres y estudiantes de grupos afroamericanos
Comunidades de Aprendizaje e indígenas) que participaron en proyectos financiados por la
adoptó una nueva visión, Fundación en sus Áreas Geográficas Prioritarias (AGP).
que se basó en la visión La Iniciativa de las Comunidades de Aprendizaje
ampliada de la educación La Iniciativa de Comunidades de Aprendizaje (ICA) creada en
básica establecida en la 1998 representó la culminación del aprendizaje adquirido a través
Declaración de Jomtien de la programación educativa en América Latina y el Caribe en los
sobre la Educación para años noventa. Esta abarcó una nueva visión de la educación basada
en una visión más amplia de la educación básica promulgada en
Todos de 1991. la Declaración de Jomtien sobre Educación para Todos de 1991. Su
objetivo final fue aumentar la matrícula, retención y finalización
de los estudiantes y mejorar la alfabetización y otros resultados de
aprendizaje entre los niños y los jóvenes.
Con ese fin, la iniciativa se planteó dos objetivos centrales. El primero fue demostrar formas
de revitalizar los sistemas escolares públicos y mejorar la calidad de la educación en las escuelas
públicas y privadas situadas en zonas de pobreza y extrema pobreza. Algunas de las posibles
estrategias incluyeron la capacitación y la educación permanente de los maestros; la mejora de las
prácticas de enseñanza y la motivación, la autoestima y la asistencia de los maestros; la innovación
educativa, incluyendo la adaptación de los planes de estudio a las necesidades e intereses
locales y culturales; el uso de las artes, la cultura, los deportes y los eventos comunitarios como
oportunidades de aprendizaje; y la motivación de la participación de los padres y la comunidad
en la planificación, la gestión y las actividades educativas de la escuela.
El segundo objetivo de la iniciativa fue probar formas de democratizar el acceso a las
oportunidades de aprendizaje entre todos los miembros de una comunidad y situar la educación
formal, no formal e informal en el centro de los procesos de desarrollo local y comunitario. Esto
también implicó una variedad de estrategias potenciales: abrir la escuela a la comunidad y crear
un papel para la escuela en el desarrollo local reconociendo a la escuela como uno de los muchos
espacios de aprendizaje disponibles para los miembros de la comunidad; invitar a los miembros
de la comunidad a que diseñen y promuevan oportunidades de educación de adultos para
satisfacer una variedad de necesidades e intereses; articular las actividades de aprendizaje en
la escuela y fuera de la misma como un solo sistema que posibilitara el aprendizaje permanente;
y crear alianzas multinstitucionales y multisectoriales que apoyen el aprendizaje continuo.
Finalmente, la IAC concibió a la comunidad de aprendizaje en el sentido más amplio de
la palabra, como "una comunidad que se organiza y se involucra en sus propios proyectos de
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educación para educar a sus miembros". Esta visión se fundamentó en la premisa de que "el
aprendizaje es una necesidad de todos y una tarea de todos", y la suposición de que todas las

111 Se trata de donaciones de alto valor por un total de varios millones de dólares; las cuales se contabilizan entre las
donaciones para la agricultura y no para la educación.
112 IFR. Instituto Internacional de Planeación de la Educación (IIPE) (P0093154). 16 de noviembre de 2001.

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