Page 178 - Aprendizajes y Legados del Trabajo en el Campo
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fuentes internacionales. El desarrollo de una escuela agrícola modelo desde sus inicios, y su
continuo funcionamiento bajo condiciones difíciles, son quizás los testimonios más destacados de
la contribución de la Fundación al desarrollo institucional en Haití. CRESFED continúa operando
importantes proyectos relacionados con el desarrollo comunitario, la seguridad alimentaria y el
agua y el saneamiento en varias regiones de Haití. El actual coordinador general de proyectos de
CRESFED reconoce el papel que el financiamiento y el apoyo de las fundaciones en la década de
1990 desempeñaron para ampliar la visión de CRESFED y reconocer un menú de opciones para
la solución de los problemas haitianos, que se hizo disponible a partir de la interacción con otros
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proyectos financiados por la WKKFF en el país.
Los proyectos y actividades relacionadas también apoyaron la formación de líderes que
continúan trabajando a la vanguardia del desarrollo en Haití. Entre ellos hay dos miembros del
programa KILP y dos beneficiarios de becas de estudio. Una de esas becarias reconoció en una
entrevista la importancia de su membresía en el Programa de Liderazgo Internacional de Kellogg
para su crecimiento profesional y personal. Su beca llegó en un primer momento de su carrera, y
la interacción con personas de ideas afines de toda América Latina confirmó y reforzó su decisión
de dedicarse al desarrollo comunitario en su país. La red de KILP sigue proporcionándole acceso
a recursos y apoyo de colegas de toda la región. También se fortaleció el liderazgo en varios
departamentos de la Universidad de Quisqueya a través de donativos y apoyo y, gracias a una
donación en febrero de 2014 para establecer un Centro de Innovación para la Educación Continua,
la universidad ha seguido desempeñando un papel en los programas de la Fundación. La clave
para el fortalecimiento de las instituciones y los líderes locales fue el apoyo de la Fundación a las
instituciones indígenas con líderes locales. Esto va en contra de la práctica de muchos donadores
internacionales cuyo financiamiento fue y sigue siendo otorgado a instituciones bajo liderazgo
extranjero.
Varios proyectos también apoyaron el surgimiento de líderes a nivel comunitario. La labor
de CRESFED fue importante para fortalecer a las mujeres líderes, en particular. Un número de
individuos que surgieron durante los programas de liderazgo de CRESFED en la década de 1990,
hoy son reconocidos como líderes legítimos comprometidos a largo plazo con sus comunidades,
y algunos ocupan puestos políticos en el gobierno local. Además, varios graduados de la Escuela
Agrícola de la Fundación Vincent, incluidos algunos que continuaron sus estudios en el ISA en
República Dominicana o en Zamorano en Honduras, han desempeñado un papel importante en el
fortalecimiento del sector agrícola de Haití.
Los logros de estos líderes fueron aún más importantes dadas las dos características del
entorno haitiano. Uno de ellos fue la debilidad generalizada de las organizaciones e instituciones
haitianas y la escasez de un liderazgo eficaz tras años de represión política y disturbios. El
segundo fue la continua agitación política y social, que persistió durante todo este periodo a
pesar de la gran esperanza de estabilidad a principios de la década de 1990. La inestabilidad
resultante a menudo hacía peligroso trabajar en comunidades rurales y vecindarios urbanos, y
varios proyectos sufrieron los efectos de la violencia, como el incendio de edificios y los intentos
de asesinato contra el personal de los proyectos. En estas condiciones, a veces se interrumpió
la ejecución de los proyectos, y la mayoría de ellos necesitaron más tiempo para completar las
actividades financiadas. En algunos casos, como hemos visto, los informes eran irregulares y la
Fundación perdió contacto con los beneficiarios, lo que dificultaba la evaluación completa del
impacto de la iniciativa. El director de programa responsable de Haití reconoció en el año 2000
que: “todo proyecto que financiamos en la situación actual de Haití es un riesgo, debido a la
inestabilidad política y social y a la falta de instituciones”, y reconoció que la persistencia de los
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beneficiarios en semejantes condiciones era poco menos que “milagrosa”.
Se puede decir que hubo casos de impacto real a nivel local y surgieron varios líderes fuertes.
177 Entrevista con Tania Pierre-Charles-Castor, 4 de agosto de 2014..
178 Informe del Progreso Anual del Segundo Año P43010; 7 de julio de 2000.
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