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La Historia de Rejane y su Familia 219
En abril del año 2000, Rejane se convirtió en una de los 160 jóvenes que se unieron a la
formación de dos años de Agentes de Desarrollo Local en CC Bacia do Goitá en Pernambuco,
Brasil. Como parte de ese grupo, adquirió habilidades en desarrollo comunitario, comunicación
personal, tecnologías para pequeñas granjas y computación básica para ayudarla a perseguir
una labor de desarrollo comunitario. En casa, Rejane compartió su entusiasmo por lo que
estaba aprendiendo. Al poco tiempo, su padre de 70 años de edad, aceptó acompañarla a una
sesión de formación sobre nuevas tecnologías de producción orgánica para pequeñas granjas.
Como resultado, adoptó nuevas técnicas, se convirtió en un líder de la agricultura orgánica en
la cuenca del río Goitá y pronto ayudó a otros a hacer lo mismo. De sus seis hijos, dos que se
habían mudado al sur hace muchos años, regresaron a Goitá en 2002, después de vislumbrar
nuevas oportunidades de crecimiento económico; otros dos hijos planeaban regresar pronto.
Otros en la comunidad, también estaban entusiasmados con las nuevas posibilidades. Cincuenta
familias fueron acreditadas para comercializar sus verduras orgánicas por medio de la
cooperativa local, y en 2002, otras 120 se encontraban en las etapas finales de la formación.
Una clave para involucrar a jóvenes como Rejane y su familia ha sido poner a su alcance
nuevas alternativas económicas. Hasta el año 2001, las comunidades de la cuenca del Goitá
dependían únicamente de dos cultivos, la mandioca y la caña de azúcar. Ambos trajeron
consigo una rentabilidad deficiente; se enfrentaron a una disminución de la productividad y
fueron vulnerables a las fluctuaciones de los mercados locales y mundiales. Muchas familias,
y especialmente los jóvenes, se estaban trasladando a otros lugares en busca de empleo u otras
oportunidades económicas.
El CC Bacia do Goitá ha enseñado a los productores locales de todas las edades a diversificar
la producción para su propio uso, y a comercializar sus excedentes localmente y en Recife. Los
productores locales fortalecieron su producción y comercialización mediante la formación en
técnicas comerciales e informáticas. Un gran número de familias aprendió a producir vegetales
orgánicos, fueron acreditadas como agricultores orgánicos y crearon un nicho de mercado
potencialmente grande en Recife. Los productores tenían una serie de clientes habituales a los
que entregaban semanalmente una canasta de productos orgánicos. Familias como la de Rejane
duplicaron sus ingresos como resultado de los nuevos enfoques.
Una multitud de microempresas surgió como consecuencia del aumento del
emprendimiento. Aunque muchas se retiraron debido a la baja demanda y a la mala planeación,
reflejaron una nueva mentalidad que se arraigó en esas comunidades y que inspiró la esperanza
de una salida factible de la pobreza.
El desarrollo de la ciudadanía y el liderazgo también son vías importantes y fructíferas para
aumentar el capital humano. La mayoría de los CC llevó a cabo algún tipo de formación para
ampliar las habilidades de los jóvenes en áreas que mejoraban sus posibilidades de convertirse
en ciudadanos socialmente responsables y productivos. El aprendizaje de habilidades como la
comunicación personal, la comprensión del funcionamiento de los sistemas sociales y políticos,
la construcción de valores, aptitudes, el trabajo en equipo y la administración de proyectos,
ayudaron a los jóvenes a ampliar su visión de la vida y a convertirse en agentes de cambio capaces
de motivar a los demás. Hubo docenas de casos ejemplares de jóvenes líderes formados a través
de los CC, que se convirtieron en ciudadanos y figuras públicas y/o empresariales prominentes
en sus comunidades. A nivel regional, el programa de liderazgo de PLDS demostró ser exitoso a
medida que la mayoría de los participantes progresaban en sus carreras profesionales y ocupaban
puestos que les permitían impartir lo que habían aprendido a un público más amplio.
En general, los esfuerzos para cambiar los sistemas de educación formal fueron menos
exitosos que los de la educación no formal. Si bien la movilización de los jóvenes se extendió más
219 De la “Actualización para el Consejo sobre el Programa de América Latina y el Caribe”, WKKF, septiembre de
2002.
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