Page 238 - Aprendizajes y Legados del Trabajo en el Campo
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los centros de capacitación con fines de lucro, sino como una herramienta para el desarrollo del
                       civismo. Por ejemplo, en el modelo del CDI, una comunidad aplicó un proyecto para limpiar
                       un cruce sobre un riachuelo local que se usó como caso de estudio de tecnología aplicada. Los
                       estudiantes aprendieron a usar el procesador de palabras para elaborar una encuesta de opinión;
                       luego, aprendieron a usar la hoja de cálculo para tabular los resultados de la encuesta, seguido por
                       el software de presentación para compartir sus hallazgos con la comunidad.
                           Las Escuelas de Informática y Ciudadanía (EIC) eran centros de formación autosostenibles,
                       establecidos inicialmente en algunas “favelas” de Río de Janeiro pero que se expandieron
                       rápidamente a otras áreas. Cada EIC recibía asistencia técnica del CDI pero debía autosostenerse
                       con el apoyo de la comunidad. Los estudiantes pagaban una cuota simbólica para inscribirse en
                       los cursos y ayudar a pagar a los capacitadores; quienes no podían pagar la cuota, podían trabajar
                       como voluntarios para cubrir este costo. Del año 2000 al 2006, la WKKF apoyó al CDI como un
                       experimento de franquicia social a medida que expandía su innovador trabajo a dos estados del
                       noreste. Los nodos del CDI establecidos en Pernambuco y Ceará recibieron formación y asistencia
                       administrativa de la sede en Río de Janeiro e implementaron con éxito 60 EIC autosostenibles
                       en zonas urbanas y rurales, donde formaron a más de 15,000 jóvenes. Los nodos asumieron la
                                               responsabilidad de recaudar fondos con lo que obtuvieron equipo
                                               donado y de segunda mano que reacondicionaron. También
                                               brindaron asistencia técnica, educativa y de procedimientos a las
             El equipo de América Latina       EIC. Con el éxito de Ceará y Pernambuco, la Fundación financió al
             y el Caribe de la Fundación       CDI para la expansión de la franquicia social a otro cinco estados
             entendió claramente que           de Brasil. Por último, en 2008, la Fundación otorgó una donación
                                               a la Fundación Mentor para la implementación de una red de
             llevar infraestructura a las      franquicias del CDI en Ecuador. Hoy en día, las franquicias del CDI
             comunidades vulnerables no        tienen presencia en 15 países y existen más de 800 EIC activas a nivel
             siempre era la mejor manera       global. 243
                                                    La Asociación Grupo Ceiba, en la Ciudad de Guatemala, puso
             de ayudar a cerrar la brecha      a prueba otra idea innovadora usando el poder de la tecnología
             digital como fundación            de la información, en este caso para aumentar las oportunidades
             privada.                          económicas para los jóvenes en situación de riesgo. Ceiba, una ONG
                                               bien conocida fundada en 1989, contaba con larga experiencia de
                                               trabajo con jóvenes en situación de riesgo. La organización entendía
                                               que los jóvenes de ciertas áreas de la ciudad, como Los Limones,
                       donde el 70% de las familias viven por debajo de la línea de pobreza, no darían su domicilio real
                       en una entrevista de trabajo. Temían que la mala reputación de su lugar de procedencia fuera una
                       desventaja. Para equilibrar mejor la balanza, Ceiba les dio a estos jóvenes una ventaja competitiva
                       en el mercado laboral ofreciendo la formación que otros no tendrían, como cursos de diseño
                       web o reparación de computadoras. Ceiba desarrolló esta estrategia para crear su “Programa
                       de Educación Comercial”, cuyo objetivo era mejorar las habilidades laborales de los jóvenes en
                       situación de riesgo. De 2004 a 2009, la WKKF financió el esfuerzo de Ceiba por capacitar a más de
                       5,000 jóvenes en informática y formar una cooperativa que ofreciera servicios como diseño web
                       o un centro de llamadas bilingües. En 2005, Ceiba recibió el Premio a la Innovación Social de la
                                                                           244
                       Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL)  de las Naciones Unidas por el
                       trabajo innovador que incluyó este programa, entre otros.


                       243   Consulte http://www.cdi.org.br/.
                       244   El “Premio a la Innovación Social” fue un programa que estuvo vigente entre 2005 y 2009 gracias a una donación
                       de WKKF. Consulte: Marulanda, NR and Tancredi, FB – De la Innovación Social a la Política Pública - Historias de Éxito
                       en América Latina y el Caribe , Naciones Unidas, CEPAL, noviembre de 2010. Descarga gratuita desde: http://www.
                       cepal.org/dds/innovacionsocial/portada_i.htm.






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