Page 88 - Aprendizajes y Legados del Trabajo en el Campo

Los resultados de Plan Sierra han sido destacados. Los métodos sostenibles de agricultura y
silvicultura han sido adoptados exitosamente, la productividad ha aumentado y la producción se ha
diversificado, se ha reforestado significativamente y se ha reabastecido la cuenca. Las tasas de enfermedades
infecciosas y mortalidad materna han caído con el uso de prácticas preventivas, la nutrición ha mejorado
y las clínicas establecidas por Plan Sierra se han integrado al sistema de salud gubernamental. Los
elementos de educación ambiental y nutricional desarrollados por Plan Sierra se han incorporado al
programa de estudios nacional. Se han establecido organizaciones comunitarias de varios tipos, consejos
de desarrollo locales, asociaciones de agricultores y silvicultores, comités de salud, grupos de créditos para
mujeres y centros juveniles, cuya dirección sigue siendo principalmente autónoma y que, con el tiempo,
han desarrollado la capacidad de negociar con instancias públicas. Tal vez lo más importante sea que los
habitantes de Sierra han llegado a creer, gradualmente, que tienen el control de sus propias vidas gracias
a los procesos de prueba lentos y a la adopción de técnicas de producción efectivas y sostenibles para luego
organizarse y buscar mejoras posteriores.
Plan Sierra sigue operando en la región, donde actualmente se está reposicionando como facilitador en
vez de implementador del desarrollo en la Sierra. Está invirtiendo mucho en su propia fuerza institucional
con sistemas de vanguardia de planeación, evaluación y contabilidad, con el apoyo de una subvención de
más de USD 13 millones de la Agencia Francesa de Desarrollo.
Las contribuciones de la WKKF a la evolución de Plan Sierra cuentan con un amplio reconocimiento.
En 2002, el entonces director ejecutivo de Plan Sierra, Fermín Ramírez, declaró que "...la Fundación
Kellogg ha sido la piedra angular no solo del desarrollo de Plan Sierra sino del desarrollo de este región del
país". Las contribuciones de la Fundación se reparten en tres categorías: financiamiento de programas
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centrales en los primeros años de Plan Sierra, que también sirvió para atraer financiamientos adicionales;
fortalecimiento institucional, principalmente a través de inversiones en la capacitación del personal, como
participación en seminarios e intercambios internacionales; además de la contribución intelectual de los
directores de programa de la Fundación al desarrollo general de la Fundación, en particular estimulando
al personal de Plan Sierra para trabajar de manera integrada en todos sus programas ecológicos y sociales.

El Programa UNIR: Una Nueva Iniciativa en Desarrollo Rural
En 1993, la Fundación comenzó a planear una nueva fase para sus programas de desarrollo
rural. Bajo el nombre de Iniciativa UNIR, el objetivo generalizado de este esfuerzo era "...estimular
un esfuerzo interdisciplinario y colaborativo entre comunidades selectas, instancias públicas y
privadas y universidades, en el cual estas últimas tomarían el papel de catalizador para abordar
las necesidades básicas del desarrollo rural por medio de modelos de innovación". Lo anterior
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se tradujo en dos metas centrales. Una era cambiar la forma de enseñanza para los estudiantes
universitarios de agricultura y sus disciplinas relacionadas con tal de darles una mejor formación
que les ayudara a abordar los problemas rurales. En la práctica, esto implicaba el desarrollo de
una orientación al servicio. Los estudiantes de varias disciplinas dejarían el salón de clases para
aprender juntos a resolver problemas en proyectos comunitarios, desarrollando una metodología
de acción/reflexión en la que profesorado y alumnos discutirían y aprenderían de su trabajo con
las comunidades. Los programas de estudios reformados reflejarían este enfoque. La segunda
meta era desarrollar modelos de desarrollo rural capaces de atacar la pobreza rural con las
siguientes acciones:
• Crear capacidades en las comunidades locales para formar su propia trayectoria
de desarrollo, utilizar los recursos locales y negociar con instituciones públicas de
servicio responsables de proporcionar servicios básicos.

• Fortalecer la capacidad de las instituciones para atender las necesidades y demandas
locales.

72 Ver el sitio web del aniversario 75 de la WKKF
73 Plan de programación para la década de 1990. Versión revisada, enero de 1994.

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